martes, 22 de junio de 2010
Indios y vaqueros
El juego favorito de pequeños era el de indios y vaqueros -en el caso de los niños-, unos hacían de indios y otros de vaqueros, se disparaban tiros imaginarios y de algún modo se eliminaban de la refriega. Era la influencia de las películas americanas de este género (las películas de Alan Ladd y demás). No había ningún personaje en concreto, todo lo más el indio Jerónimo, el caso es que los indios eran como los malos y los vaqueros los buenos. Llegábamos a construir las pistolas de madera y los arcos y flechas con palos. En Reyes pedíamos pistolas de estralos para mejorar la parafernalia. Teníamos, también, figuritas y fuertes para jugar, montábamos una escenografía y hacíamos las batallas moviendo con las manos los indios y los vaqueros. Cuando íbamos a ver las películas y aparecía el séptimo de caballería para salvar a los buenos, la gente se ponía a aplaudir a rabiar como reconocimiento de aquella buena acción que acababa con la maldad de los malos, los indios, por supuesto. Con el paso de los años me he convencido de que sufrimos manipulación de los sentimientos,..., los buenos y los malos no son tan fácilmente reconocibles.
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1 comentario:
Que bellos comentarios!
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