Los niños solíamos comprar en las tienditas diversos elementos para nuestro entretenimiento, con algunas perrillas de que disponíamos. Había caramelos, chicles, pipas y toda suerte de golosinas, entre las que destacaban los platanitos y unos caramelos que asemejaban a cortes de tallo. Pero también podíamos comprar sobres de estampitas para acabar la colección del momento, y chistes de todo tipo, desde el TBO hasta Hazañas Bélicas o el Jabato. Había, también, los sobres sorpresa, que contenían cosas variadas, y, como su nombre indica, que podía uno disfrutar de encontrar sorpresas de figuritas o juguetitos variados como, por ejemplo, voladores al estilo de aspas de helicóptero. Recuerdo la tienda que había al lado del club Rodeiramar, con la señora Vilerma (si no me equivoco) metida en aquella ventana, con los chistes colgados con pinzas, cual piezas de ropa, en su interior. ¡Era lo que había!.
1 comentario:
Recordais los caramelos Kenko?
eran pequeñitos y los vendian a peso
Y los sobres Montaplex? que traian juguetes que haboa que montar? eran los precursores de Kinder sorpresa
Un abrazo
Carmelo Parrado
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